Siempre me han fascinado las grandes obras de ingeniería, pero esta en particular me impresiona aún más.
El Viaducto de Millau sostiene el tráfico de la autopista Autoroute A75 mientras cruza el valle del río Tarn, cerca de la ciudad que le da nombre.
Con una impresionante longitud de 2,460 metros y una altura que alcanza los 343 metros, deja boquiabiertos incluso a los más escépticos. Debajo cabría sin problema nada menos que la emblemática Tour Eiffel.
-Foto escaneada de negativo B/N-